SI NO HACE CACA, ESTIMÚLALO CON EL TERMÓMETRO

Otro de los problemas clásicos: las cacas del niño. Las deposiciones del niño van a cambiar durante los primeros días, de ser negras pasan a ser amarillo-líquidas en los alimentados con LM a ser más pastosas y en ocasiones de diferentes tonalidades con leche de fórmula.  

Es importante saber que  NO SE HA DE DEFECAR TODOS LOS DÍAS. Casi todos los bebés llegan a estar dos o tres días sin defecar; muchos están cinco o siete días, algunos 10 o 15 días, y los hay que tardan todavía más. Pero la hacen sin esfuerzo ni dolor. Eso no es estreñimiento; es completamente normal, y no hay que hacer nada: no hay que dar al bebé zumo, ni agua, ni hierbas, ni laxantes, ni meterle el termómetro por el culito ni el ramito de perejil ni supositorios. No hay que hacer nada, porque es normal, y ya hará caca solo cuando tenga que hacer.

Estas cacas poco frecuentes solamente aparecen en el bebé con lactancia materna exclusiva. Normalmente basta un poco de leche artificial o de cualquier otro alimento para que el efecto desaparezca: o bien hacen caca con más frecuencia o bien caen en el verdadero estreñimiento, con heces duras y secas. Hasta hace unos años había muy pocos bebés que tomaran lactancia materna exclusiva más de dos meses, algunos médicos y enfermeras todavía no saben que estar varios días sin hacer caca es normal en niños de pecho.

Los bebés tienen que “aprender” a hacer caca. Deben aprender a coordinar la contracción de la musculatura abdominal, junto con la relajación del periné / esfínter anal (este es el motivo por el que en ocasiones se ponen muy rojos al hacer caca, aunque luego las deposiciones sean líquidas).

Este proceso de aprendizaje ocurre a lo largo de los primeros 6-8 meses de vida. Si nosotros estimulamos la zona rectal estamos interfiriendo en este aprendizaje, y el bebé “aprenderá” que para hacer caca tiene que esperar a que se estimule la zona rectal.

Si tu bebé sufre un estreñimiento (deposiciones duras, como bolitas, cada 2-3 días) consúltalo con tu pediatra para poder establecer un tratamiento adecuado, pero intentando que no incluya la estimulación rectal en la medida de lo posible.

 

LEYENDAS URBANAS SOBRE VACUNAS

Estamos en otoño y comienzan los resfriados, diarreas, etc. También la GRIPE. Es un período para hablar de vacunas en general, tanto para niños como adultos. 

Desde 3 Ducktors, antes que nada, queremos afirmar, que somos PROVACUNAS, ya que ayudan a prevenir enfermedades. Gracias a ellas, la salud de las personas es mejor, ya que con ellas se evita que millones de personas caigan enfermas por enfermedades contagiosas y con ello se han salvado millones de vidas. Ejemplos recientes de esto es la disminución de COVID en países desarrollados tras la vacunación, la erradicación de la Viruela, etc. 

Sin embargo, las cosas no son tan fáciles y sigue habiendo personas que dudan de la eficacia y seguridad de las vacunas. Vamos a intentar desterrar una serie de mitos con respecto a ellas:

1. YO NO VACUNO A MI HIJO PORQUE EN EL SIGLO XXI YA NO HAY TANTAS ENFERMEDADES COMO ANTES Y YA NO MERECE LA PENA VACUNARSE. FALSO

Este es un mito muy extendido. Cierto es que vivimos en una época y en una parte del mundo en donde las condiciones higiénicas y sanitarias han mejorado espectacularmente en los últimos 100 años. Pero uno de los motivos por los que hemos llegado a este punto son las vacunas. De hecho hay enfermedades erradicadas gracias  a las vacunas, como la viruela, y otras que ya se han convertido en raras como la varicela y el sarampión. Sin embargo, si dejamos de vacunar a nuestros hijos, esas enfermedades que ahora te suenan raras o desaparecidas volverán, y con ellas las complicaciones y las muertes que acarrean.  De hecho se está observando un repunte de sarampión y polio en países en los que se ha observado una disminución de la cobertura vacunal.

2. ES MEJOR CONTAGIARSE DE UNA ENFERMEDAD Y PASARLA QUE PROTEGERTE CONTRA ELLA CON UNA VACUNA. FALSO

Cierto es que algunas de las enfermedades contra las que existe una vacuna pueden ser banales (gripe, varicela, rubeola…), lo que genera la falsa creencia de que es mejor contagiarse y “pasarla” para que así la inmunidad que se adquiere sea “natural”, pero hay que saber que estas enfermedades no están exentas de complicaciones, entre ellas, la muerte. Es preferible vacunarse que “pasar” la enfermedad y exponerse a riegos innecesarios.

3. LOS EFECTOS SECUNDARIOS DE LAS VACUNAS SON MUY FRECUENTES Y PELIGROSOS. FALSO

Como todo en medicina, las vacunas pueden tener efectos secundarios, que en general son leves y autolimitados, como por ejemplo fiebre y enrojecimiento en la zona de punción. Pese a todo son preferible estos efectos secundarios que las enfermedades y sus complicaciones contra las que nos protegen las vacunas. Otras sustancias como Ibuprofeno, Paracetamol también tienen efectos secundarios y se toman de una manera “mas alegre” sin pensar en sus efectos secundarios con Insuficiencia renal y/o hepatitis.

4. YO NO VACUNO A MIS HIJOS PORQUE LAS VACUNAS CONTIENEN MERCURIO Y ALUMINIO. FALSO

Durante mucho tiempo, en la fabricación o conservación de algunas vacunas, se ha utilizado como conservante el timerosal (una sal orgánica que contiene etilmercurio) por sus propiedades antimicrobianas. Sin embargo, desde hace unos años se ha ido reduciendo la cantidad de timerosal utilizado o se ha eliminado completamente, sustituyéndolo por otros compuestos para la conservación y fabricación de aquellas vacunas que antes lo contenían. Hoy en día, ninguna de las vacunas que se utilizan en los calendarios vacunales de las distintas comunidades autónomas españolas contiene esta sustancia mercurio como para que sea peligroso.

Nos podemos preguntar entonces por qué se ha retirado el timerosal de la composición de las vacunas si no es tóxico, pues por un principio de prudencia básico y por la alarma social que se ha creado alrededor de esta sustancia. Aunque las cantidades de mercurio a las que podía estar expuesto un niño español antes de los 14 años por la vacunación serían muy inferiores a las que se consideran tóxicas por los diferentes organismos mundiales, una vez que ha sido posible, se ha considerado oportuna su sustitución por otros compuestos también inocuos.

Sí, algunas vacunas contienen muy pequeñas cantidades de sales de aluminio como adyuvante o potenciador de la respuesta de defensa.

Las sales de aluminio se usan como adyuvantes de vacunas desde hace 70 años y son componentes imprescindibles para estimular el sistema inmunitario y permitir introducir menores cantidades de antígeno, que podría resultar perjudicial, en el organismo. Nunca se ha registrado ningún efecto adverso relacionado con el aluminio existente en algunas vacunas. La cantidad de aluminio que contienen las vacunas es muy inferior (menos del 1%) a las cantidades de aluminio que de forma natural contienen, por ejemplo, los alimentos habituales que consumimos, incluida, por chocante que resulte, la leche humana.

CATARROS Y MOCOS: MITOS Y LEYENDAS

1. LOS CATARROS SON CONSECUENCIA DEL FRÍO. FALSO

Los catarros suelen ocurrir principalmente en los meses fríos del año, sin embargo, estos se producen por infecciones por virus. Es el tipo de infección más frecuente que tienen los niños, en especial si van a guarderías.  Tampoco se va a resfriar por ir descalzo en casa.

2. MI HIJO TIENE MUCHOS MOCOS, SEGURO QUE LE VA A SALIR UN DIENTE. FALSO

No hay ninguna base científica en esta afirmación. Ningún estudio de calidad ha conseguido demostrar que la salida de un diente produzca mucosidad nasal. Durante los primeros 2-3 años de vida de un niño salen un montón de dientes de leche por lo que es habitual que coincidan en el tiempo la salida de uno de ellos con un catarro que produzca moco. Tampoco está demostrado que la erupción de los dientes produzca fiebre.

3. MI HIJO ESTÁ MUY ENFERMO, LLEVA CON MOCOS VARIOS MESES. FALSO

La duración media de la mucosidad durante un catarro son unos 15-20 días. Si tenemos en cuenta que un niño de guardería se contagia de unos 10-12 al año (concentrados en el invierno) lo normal es que siempre esté con mocos.

 4. A MI HIJO LE HA BAJADO EL MOCO AL PECHO. FALSO

Los catarros no bajan al pecho, es decir, el moco no gotea por detrás de la garganta, accede a la tráquea y llega al pulmón. Eso no ocurre así. Si esto sucediera, sería equivalente a arrojarlo a una piscina, por lo tanto, se ahoga. Sin embargo, los virus que dan lugar a bronquitis y bronquiolitis empiezan siempre por un cuadro catarral que constituye un caldo de cultivo para que se desarrollen más virus que colonizarán los diferentes órganos (pulmón, intestino, garganta…). Esa llegada del virus al pulmón es la que genera moco y no al revés.

5. EL MOCO DE MI HIJO SE HA INFECTADO PORQUE HA CAMBIADO DE COLOR A VERDE Y/O AMARILLO. FALSO

Durante un catarro común el moco cambia y evoluciona de color. Al principio suele ser líquido y trasparente para en unos días hacerse espeso con un color amarillo o verde. Esto ocurre normalmente en cualquier catarro y no es un signo de que esté ocurriendo ninguna complicación; todo lo contrario, es sinónimo de inicio de curación. 

6. LA MEJOR FORMA DE LIMPIAR LOS MOCOS ES CON UN “SACAMOCOS”. FALSO

Los lavados nasales son la forma más eficaz de limpiar la nariz. Para ello es necesario tener un poco de “mala leche” y hacerlo con fuerza, como si se limpiara una tubería. Los aspiradores de moco resultan poco eficaces, ya que no llegan a la orofaringe (parte de atrás de la nariz, donde se junta con la garganta), además de ser poco higiénicos.

7. VOY A DEJAR DE DAR LECHE A MI HIJO PORQUE LE PRODUCE MOCOS. FALSO

Este es quizá de los mitos más extendidos. La leche no produce mocos. Al igual que con los dientes, no existen estudios de calidad que hayan demostrado que esa afirmación sea correcta.

COSTRA LÁCTEA: QUE HACER

La costra láctea, que aparece en la cabeza de algunos recién nacidos en la primera o segunda semana de vida, es la primera manifestación de la dermatitis seborreica. Consiste en una placa grande, de color amarillo-blanquecino, con escamas de aspecto grasiento, que no pica.

Afecta especialmente a aquellas áreas con mayo cantidad de glándulas sebáceas (glándulas que segregan grasa), por ejemplo, las orejas y el cuero cabelludo, pero posteriormente también el tronco, las cejas, los grandes pliegues (ingles, axilas) y el área del pañal.

Predomina sobre todo la forma infantil, autolimitada, que afecta a los niños durante los primeros meses de vida y luego desaparece. La forma del adulto puede comenzar en la pubertad.

Es un proceso autolimitado, con tendencia a la remisión y la aparición de las lesiones de nuevo. Algunas medidas pueden ayudar a disminuir los brotes o mejorarlos:

Higiene: utilizar jabones neutros. Hay geles y productos especiales para la dermatitis seborreica, tanto infantil como del adulto.  Evitar sustancias irritantes y el estrés.

La costra láctea se puede retirar con aceites, vaselina o geles específicos para la costra láctea.  La piel de los bebés es más fina y frágil que la de los adultos, por lo que es importante utilizar unos cuidados suaves y respetuosos. Un champú suave sin jabón tiene un pH cercano al pH fisiológico de la piel, preserva el equilibrio del microbioma y no causa deshidratación. Al contrario de lo que da a entender su nombre, el distintivo “sin jabón” no quiere decir que el cuidado no lave; este apelativo se utiliza simplemente para indicar que el producto contiene menos tensoactivos (ingredientes encargados de eliminar la suciedad, pero que también resultan agresivos para la piel) que otros jabones. Por otro lado, es posible que el cuidado haga poca espuma, ¡pero que no haga espuma no significa que no lave!

Este es el tipo de champú que debe utilizarse para enjuagar los cuidados tratantes para la costra láctea.

ENFERMEDAD PIE-MANO-BOCA: ¿DEBEN DE ACUDIR AL COLEGIO?

La enfermedad boca-mano-pie es una infección generalmente benigna de causa vírica, producida por la familia enterovirus, propia de la infancia (máxima incidencia entre 1-3 años de edad) que se presenta en forma de brotes en especial en primavera y verano.

Se transmite con facilidad de persona a persona a través del contacto directo por vía fecal-oral (heces) y aérea (secreciones de nariz, boca o gotitas que se lanzan al toser).

Permanece en las heces sobre todo o en las vías respiratorias varias semanas después de padecer la enfermedad. También puede sobrevivir mucho tiempo en los objetos (pañuelos, mesas, sábanas, toallas, etc.), facilitando su transmisión.

Los niños pueden eliminar y diseminar el virus sin que tengan síntomas de estar enfermos.

Clínicamente, presenta de incubación es de 3 a 6 días. Tras unos días de fiebre moderada y malestar general, aparece una erupción con pequeñas ampollas por fuera y dentro de la boca (paladar, encías, lengua), palmas de las manos, plantas de los pies y área del pañal. Es más frecuente la afectación de las manos que la de los pies y también pueden aparecer en los dedos. Las lesiones no causan picor, se ulceran y se curan en 5 a 10 días. Generalmente es un proceso leve y sin secuelas, aunque en ocasiones al cabo de unos días, aparece un proceso de despegamiento de las uñas.

No hay ningún tratamiento específico, se pueden administrar analgésicos para aliviar los síntomas. La medida preventiva más eficaz es el lavado frecuente de manos y la desinfección de superficies contaminadas (los objetos que han estado en contacto con el niño enfermo). Es importante que todos los miembros de la familia se laven bien las manos y que lo hagan frecuentemente (especialmente tras ir al baño, tras el cambio de pañales y antes de cocinar o comer). 

Si en la evolución aparece afectación de las uñas, se tratará con higiene e hidratación.

Dado que es frecuente la infección asintomática y la transmisión del virus antes del inicio de los síntomas, la exclusión del colegio resulta ineficaz para disminuir la transmisión. Por ello, la enfermedad boca-mano-pie no se considera una causa de exclusión escolar estricta. El niño puede acudir al colegio si no tiene fiebre y se encuentra bien y las lesiones de la boca le permiten comer.

¿Si me encuentro embarazada afectará al bebé?

En caso de conocer alguna persona afectada lo fundamental es evitar exponerse. La probabilidad de que el feto resulte afectado es muy pequeña, ya que la mayoría de mujeres es probable que se hayan inmunizado contra el virus en los primeros años de vida.

MI BEBE NO GATEA

En más de una ocasión Nos hacen este comentario en la consulta. No hay estudios que demuestren que saltarse el gateo tenga alguna repercusión negativa en el desarrollo de un niño.

La habilidad para gatear se puede desarrollar en un rango amplio de meses y que tu bebé puede adoptar diferentes estilos de gateo. Tener en cuenta que los pequeños no están programados para gatear, más bien los motiva el hecho de que quieren explorar, experimentar diferentes formas de moverse y usar la que les parece más gratificante. Así que, incluso si no parece una posición clásica de gateo, deslizarse sobre el estómago, rodar o desplazarse sobre el pompis siguen siendo métodos válidos. Lo importante es que tu hijo coordine ambos lados del cuerpo y use cada brazo y pierna equitativamente. 

Es entendible que un niño con algún síndrome o problema neurológico no gatee, así como probablemente no adquiera otras habilidades motoras. Pero esto no quiere decir que no gatear significa que hay alguna alteración cerebral. Muchos niños completamente sanos se saltan este logro y se lanzan directo a caminar. Si el desarrollo del niño es adecuado, no hay por qué preocuparse. Es simplemente una variante de la normalidad.

Así que a disfrutar viendo a los niños jugar y explorar el mundo, arrastrándose, gateando y caminando, siempre vigilando que su desarrollo sea continuo y adecuado.

VACUNAS Y COLEGIO: ¿OBLIGACIÓN DE VACUNAR?

Comienza el curso escolar. Para algunos niños será la primera vez. Para los padres, uno de los documentos que deben de presentar es el carnet de vacunaciones o la justificación de estar correctamente vacunados. ¿Es preciso?

1.- Vacunar a los niños en las edades y plazos estipulados se establece con base en la intención de proteger cuanto antes a los niños frente a enfermedades que en cualquier momento pueden adquirir. Además, es un método de protección colectiva respecto al resto de niños que por cualquier causa no se puedan vacunar, ya que puede convertirse en un verdadero problema sanitario público e individual.

2.- En España, la ley no obliga a vacunar, excepto en casos de epidemias y crisis sanitarias donde puede ser decidido judicialmente

3.- Existe jurisprudencia (https://elpais.com/sociedad/2019/01/14/actualidad/1547467742_168118.html),   que sustenta el derecho de las instituciones educativas en exigir que el calendario de los niños esté actualizado en aras a proteger la salud del entorno escolar: La jueza desestimó las alegaciones de la familia al entender que los padres “olvidan los derechos de los demás, ya que entienden que su derecho a asistir a una guardería es superior al derecho a la salud del resto de los niños”.

4.- Siempre,  desde el principio de buena voluntad, si se programa un calendario de rescate adecuado a la edad del niño (puede consultar las dosis necesarias en link que aparece al final de esta píldora) y lo inicia cuanto antes, además de proteger al niño (que estamos seguros de que será lo que como padres os preocupa)  se podrá formalizar la escolarización presentando el documento acreditativo que a su solicitud le puede proporcionar el pediatra (tanto las vacunas puestas como las pendientes y calendarizadas según los intervalos establecidos).

Bibliografía: CALENDARIOS ACELERADOS. INMUNIZACIÓN DE RESCATE EN NIÑOS Y ADOLESCENTES CON VACUNACIÓN INADECUADA. https://vacunasaep.org/documentos/manual/cap-11.

10 ALIMENTOS QUE DEBEMOS EVITAR EN ALIMENTACION INFANTIL

Actualmente los padres, comienzan a reconocer las limitaciones existentes en alimentación infantil. Pero el auge del BLW y otros tipos de alimentación, conviene recordad algunos alimentos que debemos introducir de una manera más tardía:

  1. Miel: Los menores de un año no deben tomar miel por riesgo de desarrollar una enfermedad grave llamada botulismo.
  2. Atún rojo, emperador y lucio: Pescados grandes que contienen excesivas dosis de mercurio para niños menores de 3 años y para mujeres embarazadas. Por lo tanto, no se deben consumir en estas etapas de la vida. El MARISCO se puede ofrecer a partir de los 6 meses de edad. Se introducirá en función de los hábitos alimentarios de la familia.  Debido a la presencia de cadmio, los niños deben evitar el consumo habitual de cabezas de gambas, langostinos y cigalas y el cuerpo de crustáceos similares al cangrejo.
  3. Frutos secos, ni enteros ni en trocitos hasta los 5 años por riesgo de atragantamiento. No hay problema en dárselos molidos a partir de los 6 meses en cualquier receta.
  4. Salchichas tipo Frankfurt: además de ser un alimento de muy bajo perfil nutricional, ya que están compuestas por carnes procesadas, suponen una de las principales causas de muerte por atragantamiento en los niños. Nunca ofrecérselas cortadas a rodajas, en todo caso, en trozos pequeños y alargados, aunque siempre es mejor evitarlas. Los EMBUTIDOS en general, suelen tener un alto contenido en sal y puede provocarle problemas cardiovasculares desde bien pequeños.
  5. Caramelos duros, palomitas, uvas enteras… no ofrecer este tipo de alimentos hasta los 4-5 años por el mismo motivo que los frutos secos, por riesgo de atragantamiento.
  6. Sal: Los niños menores de un año no deben tomar sal en las comidas. Cumplido el año, pueden tomar pequeñas cantidades.
  7. Verduras de hoja verde como las espinacas, acelgas o col: no debemos ofrecérselas a los niños menores de un año, ya que estas verduras liberan una sustancia llamada nitritos que en algunos lactantes podrían causar una enfermedad grave llamada metahemoglobinemia.
  8. Leche de vaca: Los menores de un año deben de tomar lactancia materna o leches adaptadas. Puede ofrecerse pequeñas cantidades de leche de vaca a partir de los 8-9 meses en forma de yogur natural al día (sin azúcar), aunque no es un alimento imprescindible en su dieta. A partir del año, los niños ya podrían tomar leche de vaca entera o semidesnatada.
  9. Leche cruda: ni en menores de un año ni en la infancia en general por riesgo de encontrarnos con bacterias patógenas como puede ser la Listeria o la Brucella que a estas edades, al igual que en las embarazadas o en los ancianos, podrían causar enfermedades importantes. Recuerda que los quesos han de ser pasteurizados.
  10. Bebidas energéticas y refrescos: las razones obvias ¿verdad? Exceso de azúcares (un refresco puede tener hasta 10 cucharaditas de azúcar) y en muchos casos estimulantes causantes de trastornos del sueño y del comportamiento.

MI HIJO ME PIDE QUE LE COMPRE UN MOVIL: ¿QUÉ DEBO HACER?

No se vosotros, pero en nuestras consultas es una pregunta que nos realizan los padres. 

Hoy en día, el móvil forma parte de la familia y no podemos vivir sin su presencia y uso. ¿Cuántos de vosotros habéis puesto un video en el móvil para que vuestro hijo no llore con las vacunas? O ¿Cuántos le habéis dejado el móvil para que se entretenga y no sea “pesado” cuando estemos en algún compromiso? Además, en su grupo de amigos hay muchos que tienen móvil y tampoco se trata de estigmatizar a vuestro hijo por no tenerlo. Esta es la realidad, por lo que tenemos que aceptarla

Para nosotros, no es fácil dar una respuesta, ya que no depende de la edad Depende de la madurez del niño, del ambiente, del grupo de amigos y también de vuestros conocimientos. En el entorno en que nos movemos, el primer móvil se obtiene sobre los 12 años. Para ellos es importante sentirse igual que sus compañeros y la mayoría de ellos solo lo quieren para comunicarse vía WhatsApp, tiktok, algunos Instagram y la mayoría, simplemente, lo quieren para jugar o ver videos en YouTube.

Pero, no hemos de pensar que les damos el móvil y ya está. No. Antes de entregarle su primer móvil se tiene que hablar claramente de la responsabilidad que ello supone.

Cosas que se ha de pactar:

  • El uso ha de ser por tiempo limitado Y LO DECIDEN LOS PADRES.
  • No se debe de estudiar ni ir a dormir con el móvil. Por la noche, altera el ciclo de sueño.
  • En la mesa a la hora de la comida no hay móviles. ESTO OS LO DEBÉIS APLICAR VOSOTROS TAMBIÉN: PREDICAR CON EL EJEMPLO.
  • Enseñarles a que si llaman los padres deben de contestar lo antes que puedan.
  • No difundir fotos comprometidas de gente que conozcan. Informales que actualmente es un delito.
  • Tampoco se debe de utilizar el móvil para ofender a los demás.
  • No se contestan Números desconocidos.

Recordad que la sociedad de hoy en día es la que es y queremos que nuestros hijos vivan en ella, y tenemos que enseñarles a cómo hacerlo.

ALIMENTACIÓN EN NIÑOS: ACELGAS, ESPINACAS Y COL

Una parte fundamental de la alimentación infantil constituye la recomendación de llevar una dieta rica en frutas y verduras. Pero ¿Qué ocurre con los niños más mayores? ¿Y por qué motivo no deben comerlas los bebés? ¿Qué debemos saber respecto a las verduras en los niños? Aquí os lo explicamos:

Los pures realizados con estas verduras, constituyen un buen complemento alimenticio en la alimentación infantil. Pero estas verduras NO SE DEBEN DE ADMINISTRAR A NIÑOS MENORES DE UN AÑO. Esta recomendación está avalada por la Agencia Española Seguridad Alimentaria y Nutrición. LA razón es que estas verduras son ricas en Nitratos. Los nitratos, una vez ingeridos se trasforman en NITRITOS, que son TOXICOS, ya que compiten con el oxígeno por fijarse a la hemoglobina y consumidos en exceso en niños menores, puede provocar que la hemoglobina no sea capaz de trasportar oxígeno porque su lugar lo ha ocupado el nitrito.

Esto puede desembocar en una enfermedad grave que se llama METAHEMOGLOBINEMIA O SÍNDROME DE NIÑO AZUL; niño azul porque debido a la baja oxigenación de los tejidos, los niños adquieren una coloración azulada motivo que nos hace saltar todas las alarmas.

¿CUÁNDO SE PUEDEN COMER?

Espinacas y acelgas:

– NO DAR en niños menores de 1 año

– NO MÁS DE 45 gr al día en niños 1-3 años (guarnición)

  Si tiene una infección intestinal o gástrica: NO OFRECER.

Borrajas:

No dar en niños menores de 3 años.

Resto de verduras cocinadas:

– No mantener a temperatura ambiente ni enteras ni en puré, meterlas siempre en nevera.

– Conservar en la nevera si se van a tomar en el mismo día. De lo contrario, congelar.

– El lavado y la cocción de las verduras ayuda a reducir el contenido en nitratos.

Los nitratos también son usados en el procesado de alimentos como aditivos alimentarios autorizados, pero la legislación en este ámbito no permite su uso en los alimentos infantil.

https://www.aesan.gob.es/AECOSAN/docs/documentos/para_consumidor/TRIPTICO_AESAN_RECOMENDACION_CONSUMO_HORTALIZAS_NITRATOS_.pdf.