¿DEBEMOS USAR SUPOSITORIOS EN LOS NIÑOS?
En más de una ocasión nos encontramos ante la situación de niños que son incapaces de recibir tratamiento por boca, bien porque vomitan o simplemente porque no les agrada el sabor que tiene, en especial cuando tratamos la fiebre. ¿Qué hacemos en estos casos? Clásicamente, recurrimos a los Supositorios. ¿Son útiles? En el presente artículo, vamos a plantear algunos conceptos clave.
Un supositorio es un medicamento insertado en la zona rectal que se usa para aliviar, fundamentalmente, el dolor, el estreñimiento y la fiebre. Tiene una longitud de 3-4 cm y un peso de entre 1-3 g. Cada unidad incluye uno o varios principios activos, incorporados en un excipiente que no debe ser irritante, el cual debe tener un punto de fusión superior a 37 °C y no superiores a 43 °C. Suelen estar hechos de manteca de cacao, glicerina, agua o aceite.
Hoy en día se utilizan fundamentalmente para el tratamiento de la fiebre (paracetamol) o el estreñimiento (glicerina)
¿LO PONEMOS POR LA PUNTA O LA PARTE PLANA?
De forma común tendemos a ponerlo con la punta hacia adentro. No hay una respuesta clara al respecto. En el año 1991 la revista Lancet, muy prestigiosa a nivel médico y con gran nivel de impacto científico, publicó un pequeño estudio en el que se solicitaba a 100 pacientes que se colocaran un supositorio de una u otra forma. En el 98% de los casos en que se introdujo por el extremo romo, el supositorio se retuvo mejor y no hubo necesidad de empujar el supositorio con el dedo. En cambio, la AEP, aconseja hacerlo por la parte plana, ya que, según dice, «esto facilita que el supositorio quede alojado en el recto, porque así, cuando el ano se contrae, lo que se consigue es impulsar al supositorio hacia adentro y no al contrario».
De todas maneras, no existen estudios concluyentes que demuestren la eficacia de una técnica sobre la otra.
Nuestra opinión: REALIZARLO COMO OS RESULTE MÁS CÓMODO
CUANTO TIEMPO TARDA EN HACER EFECTO UN SUPOSITORIO
Un supositorio de paracetamol tarda entre 40 y 60 minutos en absorberse si la cavidad rectal está libre (es decir, si no hay heces estancadas en su interior, lo que es muy frecuente en los niños estreñidos). La cantidad de heces que haya en el recto, si hay diarrea, la profundidad de inserción de este, el tiempo que el niño es capaz de retener el supositorio, constituyen los factores que pueden alterar el tiempo de absorción y, por tanto, el efecto del supositorio. El tiempo que el niño es capaz de retener el supositorio sin expulsarlo, es clave, ya que cuanto más tiempo permanezca dentro, mayor absorción del medicamento habrá por parte del organismo. Un supositorio de paracetamol tarda entre 40 y 60 minutos en absorberse si la cavidad rectal está libre.
¿Y SI HAY QUE PARTIRLO?
Cuando hay necesidad de partirlos, se recomienda hacerlo de manera longitudinal, aunque a veces es muy difícil dejar dos mitades exactas, además de que al tratar de introducir una mitad tan delgada se puede desintegrar.